Contra el CSKA, vivimos en un Palacio de los Deportes lleno
hasta la bandera, otra noche europea de las que crean afición a este deporte.
Un partido apasionante sobre el parqué y vibrante desde la grada. Duelo entres
dos grandes de Europa. Duelo entre las dos mejores defensas, contra los dos mejores
ataques. Duelo entre dos claros aspirantes a coronarse en la Final Four de
Londres, pero que como no podía ser de otra manera, se decantó a favor de los
Reyes de Europa, el Real Madrid.
Como se esperaba, no fue un partido fácil. Hubo que apelar a la intensidad
defensiva para frenar a los rusos y ser fuertes en nuestros ataques para
derrocar a su gran defensa. Un partido muy emocionante, con intercambios de
parciales que hacía tanto vibrar, como desesperarse. Y al final hubo que
decidir el partido en la prórroga, donde los nuestros dieron una gran exhibición
anotando veinte puntos y pusieron de ejemplo cómo se debe ganar un partido
dándolo todo. Que se lo digan especialmente a Carroll y Rudy, que finalizaron
el partido anotando 31 y 20 puntos respectivamente.
Con esta sexta victoria en el Top16, nuestros chicos han conseguido con orgullo
un pleno en lo que llevamos disputado de esta fase, lo que les hace entrar en
la historia de nuestro Club, sellando el mejor balance de nuestra historia.
Además de ser el único equipo invicto. ¡Enhorabuena! Estamos muy orgullosos de
esta plantilla y cuerpo técnico.
En cuanto a la grada, sabiendo cómo fue el partido,
hay poco que comentar. Una grada petada de Berserkers dejándose la voz y las
palmas para llevar en volandas a nuestro equipo, haciendo vibrar al pabellón,
que siguió nuestros cánticos más que en otros partidos. No todo lo que a
nosotros nos gustaría, pero con que el público nos siga en los momentos claves,
ya nos damos por satisfechos. Al menos estos locos que vestimos de morado, lo
dimos todo y volvimos a casa con el orgullo de un trabajo bien hecho, como
demostraron las afonías del día siguiente.
¡HALA MADRID Y FORZA BERSERKERS!
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